tag:blogger.com,1999:blog-86338496196752974682024-03-14T08:49:37.294-03:00¿Hace frío allá arriba?Cuando pinte alguna musa (o muzza) caerá un toque de inspiración (o queso) por acá...Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.comBlogger148125tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-38663233542440296272016-05-17T23:52:00.000-03:002016-05-17T23:57:44.800-03:00Hacer sin saberA los 25 años, cuando me recibí de traductora, ante la premura de conseguir trabajo y el requisito ineludible de ejercer la docencia para poder hacer la licenciatura que cursaba en ese entonces, empecé a dar clases de inglés. Cierto es que jamás había querido ser docente y justamente por eso había estudiado el traductorado. Solía repetir por aquel entonces frase como: «El primer día mato un pibe y me rajan» o «Les voy a poner uno a todos ni bien me discutan algo» o «Tengo menos paciencia que un velociraptor bebé». De hecho, en la clase de orientación vocacional de la secundaria, dudaba un poco a la hora de decidir qué querría hacer en el futuro hoy por hoy presente, pero la birome podía volcar sin vacilar en la columna del jamás: Docente.<br />
Pero, a mi pesar, la vida me echó en cara eso de «de esta agua no has de beber» y mi primer trabajo fue en un colegio privado de mi barrio. El profesor viajaba a Buenos Aires por temas familiares y necesitaban a alguien que enseñara todos sus cursos porque él tenía todas las horas. El detalle que me tenía agobiada salió a la luz: yo no era profesora y no tenía idea de qué hacer. Él me dijo que tampoco, que había rendido el First y el colegio era de la familia, así que por lo tanto daba clases y ya. «Bien», pensé, «TAN mal no estoy».<br />
En resumen, me vi enfrentada a la realidad de dos divisiones desde tercer a séptimo grado, con un promedio de 30 chicos por clase. Había ido de la nada a la locura. Básicamente, me encontré cara a cara con mi peor pesadilla... Y me enamoré. Esa suplencia duró sólo un mes y medio, pero marcó un antes y un después en mi visión del mundo y me llevó a descubrir que, pese a toda mi renuencia, mi negación y alergia a los infantes, ser profesora era bellísimo. Aún cuando hacés sin saber.<br />
El día que mi suplencia terminó, los chicos me vinieron a despedir a la puerta, me abrazaron entre todos y yo me quería desarmar, pero me la banqué. En cuanto subí al auto, me lloré la vida y media, sabiendo que ese adiós era un adiós de verdad.<br />
Esta tarde en la plaza, mientras tomábamos mate y charlábamos conmemorando el Día Internacional contra la Homofobia y la Transfobia, se nos acercó un pibe que estaba en el grupo contiguo y, muy educadamente, mientras hacía ovillos con las manos, me preguntó si yo por las dudas hacía varios años no había sido profesora en la Jesús de Nazareth. Le dije que sí, sorprendida, y él me dijo que había sido mi alumno de séptimo grado y que, pese a haber tenido inglés durante toda la primaria y secundaria en el mismo colegio, con el mismo profesor, siempre se acordaba de mis clases y de que fui la única capaz de hacerles entender el verb to be. Es difícil explicar qué se siente que alguien, aparentemente desconocido, te diga algo así de bonito, sobre todo porque, como ya he establecido, yo esas clases las daba sin saber. Y en mi ignorancia completa sobre las cuestiones académicas, lo usos, costumbres, planificaciones y demás, me dejaba llevar por el instinto y por la sola necesidad de que entendieran aunque sea algo de lo que tenía para decir. Y aparentemente lo logré y, encima, el efecto duró.<br />
El otro profesor también hacía sin saber, tampoco era docente, pero tal vez le faltó algo que yo tenía: las ganas. Esas que te hace inventar canciones, coreografías, presentaciones, concursos, o lo que sea se te venga a la mente con tal de ver esa chispa en los ojos del otro que te indica que «el momento Eureka» sucedió. Esas que te transforman en una suerte de animadora infantil/psicóloga/madre/maestra/amiga/enfermera/inserte-profesión-aquí.<br />
Y ese hacer sin saber fue efectivamente eso: hacer sin saber que tenía vocación y que la estaba ejecutando un «teacher, no entiendo» a la vez.<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-73834878862670071312016-05-11T00:45:00.000-03:002016-05-11T00:45:20.332-03:00Las cosas (y los casos) por su nombreDicen los que saben de astrología que la personalidad está en realidad más marcada por tu ascendente zodiacal que por tu signo; o sea, si sos de escorpio, pero tenés ascendente en piscis, vas a ser un cabrón un tanto místico, por ejemplo. Ahora, ¿será que en cuanto a nuestros nombres puede suceder algo parecido? ¿Qué tal si el segundo nombre, ese que nadie usa y que se suele ocultar por vergüenza y suscita cargadas en el colegio cuando tus compañeros lo averiguan, es el que en realidad marca tu destino? ¿Qué pasaría si más que "Marías" y "Juanes" fuésemos "de los Ángeles" o "Ignacios"? ¿Y si el verdadero significado de nuestras vidas estuviera signado por ese otro elemento de nuestra nomenclatura personal?<br />
Convengamos también, entonces, que las personas más sencillas y descifrables serían aquellas que tienen uno solo. Esos tendrían todo clarito y sin prolegómenos: Ana a secas, Sandro y listo... No hay más misterio por resolver. Son lo que hay, como el arroz con arroz que comen los estudiantes lejos de casa a fin de mes.<br />
Mientras, aquellos con padres indecisos que cuentan con tres o más, tendrían las personalidades más intrincadas y complejas y serían casi imposibles de descifrar, pudiendo ocultar su verdadera naturaleza en la variedad de posibilidades que mostrase su DNI. Serían personas enroscadas y variables, indescifrables más allá de toda conjetura.<br />
Debiéramos tener en cuenta entonces que, a la hora de auto analizarnos y querer poner nuestros patitos en fila, el segundo nombre podría arrojar ciertas pistas sobre la "nosotredad" que nos atañe.<br />
Mi caso particular servirá de ejemplo: "Mariana SOLEDAD". Analizado etimológicamente (a los ponchazos, como debe ser todo delirio de mi parte) vendría a significar algo así como "soledad de María". Qué nombre bajón, posta. Cuando estaba por nacer, me habían mandado a hacer una placa para la pieza que decía "Alba Mariana"; estaba en la recta final para tener un nombre muy católico new age pero el destino (o más bien, mi viejo) me jugaron una mala pasada y terminé con un nombre un toque deprimente y una placa de lo que debiera haber sido.<br />
Ahora, el detalle: soy hija única y tengo una colección de amigos, conocidos y afines con los que permanezco en constante contacto, porque sentirme sola me pega mal. Sin embargo, resguardo mis cosas, mis espacios y mis rituales, disfruto de estar sola cuando necesito estarlo y, cuando pinta, invito a unos pocos elegidos a compartir conmigo ciertas partes de estas intimidades cotidianas.<br />
Visto así, tan loca no suena la teoría...<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-3158335539522582502016-05-09T18:39:00.002-03:002016-05-09T19:13:59.828-03:00Un frasco a la vezDe plástico, metal, porcelana, madera o hueso, cuando llueve la pregunta en soledad siempre es la misma: ¿dónde está mi cucharita?<br />
<div>
No la que usaré para revolver el café, ni la otra grande que es para la sopa con arroz y queso que te levanta la temperatura después de una jornada laboral, o la que hundiré en Nutella para endulzar un poco el alma, alegrar el corazón y tirarme en el sillón a pensar junto a la estufa cuándo llegará esa otra, tan requerida, que te abrace (o se deje abrazar) en las noches frías cuando la lluvia golpee las persianas y el ruido de los truenos corte tu sueño en un estruendo sobresaltando la paz.<br />
<div>
Esa que provoque hundir la nariz en su pelo, buscando el huequito ese que se forma en la nuca, justo donde se junta la columna con la cabeza... Ese es el punto exacto donde el aroma de esa persona especial se concentra. Como ya bien dijo el gran Hernán Casciari: "amas a alguien cuando su olor te calma". </div>
<div>
Y así, pese al viento que zangolotea las ventanas como si fuera a llevárselas de paseo vaya una a saber dónde; el solo de truenos implacables que sobresaltan a los gatos (y a sus dueños) y los manda zumbando abajo de la cama; y el agua, que cae a baldazos lavando las caras, los cuerpos, calles y edificios de la ciudad, dormirse con una sonrisa a la vez que se abraza (protectora) a ese ser mágico y real cuya sola presencia puede calmarte en una noche de tormenta.</div>
</div>
<div>
Y así, mientras seguís cuchareando el frasco mientras perdés la mirada en las placas de yeso del techo, empezás a rememorar otras cucharitas anteriores... ¿Será que no valdría la pena volver a buscarlas y probar si funciona el ritual una vez más? ¿Era el encastre en ese cajón de los cubiertos disfrazado de cama que es la vida, tan defectuoso? Sí, lo era, y por eso ahí andan, buscando su propio destino... Y tal vez, un bello día, aparecerá esa mezcla justa de utensilio y popurrí que te corresponda y dormirás no para apagar un rato el cerebro de la realidad, sino por el puro placer de hacerlo con alguien más. Hasta tanto, la de Nutella seguirá estando... Y con eso basta, al menos por ahora.</div>
Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-88989879826915805752016-05-06T01:15:00.001-03:002016-05-11T00:12:04.235-03:00VendavalA mí los amores no me llegan lentos y pausados, en base a un conocimiento paulatino de la otra persona; me llegan y ya, así como de sopetón. Explicándome, digamos que a mí me tumban como una suerte de sudestada, vienen con tormenta de polvo, presión variable, temperatura rara, se me revolucionan las aguas, se me mezcla todo y no sé para donde correr a esconderme. Bah, sí sé. Me escondo en la friendzone. Básicamente: cuando alguien me gusta, me pega en los ojos una mirada furtiva y fui, a partir de ahí es todo lucha y esfuerzo por lograr ser notada. Pero, para mi desgracia, tengo menos potencial de levante que una papa y lo que termina pasando es que me vuelvo amiga. Pero amiga amiga, ¿eh? Tipo, de la que te pregunta onda tu teje nuevo, tu ex que te pica la oreja o la fulana equis con la que matcheaste en Tinder.<br />
Esa soy yo... Creo que tengo tanto miedo al rechazo que me aseguro de ser lo suficientemente copada como para que me incluyan en sus vidas sin arriesgarme demasiado a que me digan que no y no me dirijan más la palabra.<br />
Ojalá supiera como revertirlo... estaré expectante a ello. Mientras, marche un préstamo el FMI para repavimentar las avenidad de Friendzoneville, la ciudad donde vive mi corazón.Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-47949076676621886312016-05-06T00:54:00.001-03:002016-05-06T00:54:45.768-03:00Concisos titubeos<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
sería fácil.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
sería sencillo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
es el potencial de la nada llegando a destino.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
es la ilusión aplacada por la razón por sobre la acción.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
es la voluntad refrenada al preferir la eternidad a un día,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Unas
horas,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Un
momento,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Un
instante…<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
lo sepas todo.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
no sepas nada.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
jamás te enteres.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Tal vez
siempre tendrás la certeza.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Probablemente,
sea todo tan evidente que,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">por más
“talveces” que inserte,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">los
nunca serían más certeros.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">Y a la
incertidumbre de los tal vez,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">y los
es posible,<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">y los
quizás y acasos<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">me
apunto y suscribo;<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">prefiero
la nada y el tal vez,<o:p></o:p></span></div>
<br />
<div class="MsoNormal">
<span lang="ES-TRAD">al todo
y la nada.<o:p></o:p></span></div>
Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-52020371083151449072016-04-07T03:53:00.000-03:002016-04-07T03:53:46.694-03:00Primer round<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<a href="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUXAEJLt9j5htjrh14FH63M6tyIggf6M02et3wdyqNj0sdeTnXEdHKr7bNCfkBKcvCtnihMW7F4KJW_pWd-yeAHC31am2fhydnqrR410db_W80xUCq_2Zx4ZS69mpQtVsdv-eD4jIMPQ7i/s1600/IMG-20160407-WA0000.jpeg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="https://blogger.googleusercontent.com/img/b/R29vZ2xl/AVvXsEjUXAEJLt9j5htjrh14FH63M6tyIggf6M02et3wdyqNj0sdeTnXEdHKr7bNCfkBKcvCtnihMW7F4KJW_pWd-yeAHC31am2fhydnqrR410db_W80xUCq_2Zx4ZS69mpQtVsdv-eD4jIMPQ7i/s320/IMG-20160407-WA0000.jpeg" width="179" /></a></div>
Cayendo del mapa,<br />
en picada,<br />
vas a sentir el impacto<br />
con tu quijada...<br />
Vas a sangrar,<br />
vas a sufrir,<br />
vas a entender lo que no va,<br />
lo que no da!<br />
Tu ignorancia es entendible<br />
pero tu altanería me subleva,<br />
podés bajar cátedra<br />
pero no tenés idea.<br />
Tu púlpito de sabiduría,<br />
tu preparación, tu estudio,<br />
No te vuelven oráculo;<br />
sos tan solo una radio<br />
transmitiendo la interferencia<br />
de tu absoluta ignorancia<br />
sobre lo que hace a mi existencia...<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-84509333010638996392015-12-16T01:50:00.001-03:002015-12-16T03:01:23.673-03:00ídemHay siete letras que nos han encontrado<br />
Siete, el número de las brujas,<br />
siete por seis...<br />
Hubo un guiño en la nada<br />
Un destello en el código irreconocible<br />
y ahí estabas,<br />
siendo irónica<br />
inesperable<br />
indescriptible<br />
vos.<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-36623597247863909762015-11-28T03:59:00.002-03:002015-11-28T04:03:34.726-03:00Vos...<div style="text-align: center;">
Duele.</div>
<div style="text-align: center;">
Raja el pecho.</div>
<div style="text-align: center;">
Quema el alma herida...</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
¿Cómo dejar de quererte si nunca pude empezar?<br />
¿Cómo dejar de pensarte si ni siquiera te pude extrañar?<br />
¿Cómo evaporar tu fantasma <br />
<div style="text-align: right;">
de mi casa</div>
<div style="text-align: left;">
de mi cama,</div>
<div style="text-align: center;">
de mí,</div>
<div style="text-align: center;">
si fuiste luz oscura que surgió de la nada</div>
<div style="text-align: center;">
y desapareció durante el día pero retorna cada madrugada?</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Las esquirlas de tus labios se hundieron en la piel</div>
<div style="text-align: justify;">
y no hay baño que las limpie </div>
<div style="text-align: justify;">
ni brebaje que sirva para parar de pensar.</div>
<div style="text-align: justify;">
<br /></div>
<div style="text-align: justify;">
Y la pena se vuelve rencor,</div>
<div style="text-align: right;">
y el rencor transmuta en pena</div>
<div style="text-align: right;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
y así se engarza la infinita cadena de este ciclo que nunca llega a un adiós.</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
¿Qué te hizo envenenar aquello que fue risa?</div>
<div style="text-align: center;">
¿Quién te dio el aguja para pinchar la burbuja?</div>
<div style="text-align: center;">
<br /></div>
<div style="text-align: center;">
De lo efímero a lo funesto,</div>
<div style="text-align: center;">
volviste nuestro cuento un insalvable recuerdo.</div>
<div style="text-align: center;">
Y la vacuidad se comió la luz...<br />
<br />
Y llevo tu sombra mezquina prendida en la solapa,<br />
esperando a ver si se escapa<br />
o se pierde en alguna esquina.</div>
Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-1584442670577211972015-11-05T04:05:00.002-03:002015-11-05T17:19:24.840-03:00Fluir...De la energía emanada<br />
pueden surgir sentires inesperados,<br />
calores inenarrables<br />
y deseos increíbles.<br />
Así, de la más absoluta nada,<br />
surgió, se creó, brotó<br />
una suerte de compañía inexplicable<br />
que a todo atañe,<br />
que a todo incluye,<br />
a la que el absoluto infinito no puede rehuírle...<br />
Es este presente inmediato<br />
que se escurre en el tiempo<br />
como agua en mis manos,<br />
que llega con dulzura y abrigo<br />
donde todo era llano,<br />
lóbrego,<br />
insípido,<br />
inerte,<br />
donde realmente creía ya verme echada a mi suerte.<br />
Dios sabrá cuál será el destino<br />
de nuestras risas y complicidades,<br />
por ahora fluyamos, vida mía,<br />
hasta que muera la tarde.<br />
<br />
<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-39961070732229221462015-09-08T01:00:00.000-03:002015-09-08T01:11:30.156-03:00Carapesta<span style="font-family: Georgia, Times New Roman, serif;">Según Wikipedia, la cartapesta es "<span style="background-color: white; color: #252525; font-size: 14px; line-height: 22.4px;">técnica que utiliza trozos de </span><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Papel" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: white; background-image: none; background-origin: initial; background-position: initial; background-repeat: initial; background-size: initial; color: #0b0080; font-size: 14px; line-height: 22.4px; text-decoration: none;" title="Papel">papel</a><span style="background-color: white; color: #252525; font-size: 14px; line-height: 22.4px;"> cortados a mano unidos mediante un </span><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Adhesivo" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: white; background-image: none; background-origin: initial; background-position: initial; background-repeat: initial; background-size: initial; color: #0b0080; font-size: 14px; line-height: 22.4px; text-decoration: none;" title="Adhesivo">adhesivo</a> <span style="background-color: white; color: #252525; font-size: 14px; line-height: 22.4px;">para formar objetos, superponiendo las capas de papel entrelazados entre sí y el adhesivo una y otra vez por lo que éste al endurecerse nos ofrece como resultado final una superficie mucho más resistente y más rígida, cuantas más capas más rigidez, con un resultado parecido al </span><a href="https://es.wikipedia.org/wiki/Cart%C3%B3n_piedra" style="background-attachment: initial; background-clip: initial; background-color: white; background-image: none; background-origin: initial; background-position: initial; background-repeat: initial; background-size: initial; color: #0b0080; font-size: 14px; line-height: 22.4px; text-decoration: none;" title="Cartón piedra">cartón piedra</a><span style="color: #252525;"><span style="background-color: white; font-size: 14px; line-height: 22.4px;">".</span></span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;"><br /></span></span>
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;">Con el correr de los años, mi cara se ha vuelto de ese material. No sé si fue la adicción a las manualidades y al canal Utilísima lo que me condujo a tal destino, pero la triste realidad es que tengo la cara más dura de toda la comarca y no me resulta útil, ni está decorada con decoupage de florcitas, sino con emociones que no se demuestran a quién las ocasiona. A saber: cuando alguien me lastima, una fuerza más poderosa que la Fox y toda la CIP juntas se apodera de mí y sólo atino a decir "¡TODO BIEN!/¡NO PASA NADA!"/¡QUÉ BUENO!" y demás frases lapidarias (para mí, claro).</span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;"><br /></span></span>
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;">Pongamos un ejemplo: me gusta A. A sabe que me gusta pero le chupa un huevo y, como yo prefiero que sigamos la "amistad" (esa del tipo en el que siempre voy a ver un ápice de luz al final del túnel aunque en realidad sea un agujero negro), voy a llenar todas las plantadas, las negativas a hacer algo, los vistos clavados con una bella capa de cartapesta hecha con todobienitud.</span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;">Un bello día, A me va a terminar contando por chat que conoció a alguien que le encaaaanta, le fasciiiina, le coooopa (no, no se me trabó el teclado, son efectos sonoros (?) y yo, mientras hiperventilo, pateo al gato, me arranco los pelos de la nuca con una mano, destapo una birra con los dientes, con la vista busco algún objeto cortopunzante cercano, con la otra mano voy a tipear: "¡QUÉ BUENO!!! ME RE ALEEEEGRO!!! VISTE QUE TE IBA A LLEGAR!?!?", con muchos emojis re adorables de tirar serpentinas y brindar...</span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;">Esa soy yo. Mi carapesta apesta, porque solo yo sé lo que me pasa realmente. Afuera hay una multitud de gente que cree soy una copada, una buena onda, una divina. No, no soy. Soy una boluda a papel y pegamento que ni queriendo a esta altura se va a poder arrancar la careta de mierda que solita se fue armando.</span></span><br />
<span style="color: #252525; font-family: Georgia, Times New Roman, serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;"><br /></span></span>
<span style="color: #252525; font-family: sans-serif;"><span style="font-size: 14px; line-height: 22.4px;"><br /></span></span>Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-9289039590689652332015-08-26T01:13:00.002-03:002015-08-26T01:32:28.740-03:00La pulgaTengo una pulga en la cabeza,<br />
molesta,<br />
inestable,<br />
insignificante,<br />
francamente insoportable...<br />
<br />
Me recorre el pelo sonriente,<br />
se abre paso por mis cejas,<br />
y se pasea por mi mente,<br />
plantando a su paso miles de quejas.<br />
<br />
Pulga lustrosa, brillante y altanera,<br />
encaramada en lo alto,<br />
con aires de grandeza<br />
y una batuta de mando tiránico.<br />
<br />
Oronda en su torre de control<br />
desfila campante y sin embargo<br />
ciertas voces del antes<br />
le trastabillan el compás del hoy.<br />
<br />
Por momentos se queda quieta,<br />
y siento que se fue.<br />
Y justo cuando creo haberla perdido,<br />
y cierto tipo de nostalgia amenaza con surgir,<br />
suena su picosa campana<br />
y me alegra saber que no se decidió a partir.Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-76828958597032675202015-05-27T23:50:00.001-03:002015-05-28T00:59:54.821-03:00Materialismo sentimental: Ex-tasisLa gran mayoría de la cantidad de objetos que pueblan mi casa tiene una historia... imagino será así en todas las casas, pero que también probablemente a la gente esto no le preocupe demasiado. Yo puedo hablar por mí... hay una taza que no puedo usar, por ejemplo, porque era en la que desayunaba mi ex, entonces está ahí para cuando vienen visitas y son ellos los que van a posar sus labios en ella y a beber su contenido. A mí, como que me da cierta alergia. Hoy en un desliz la agarré porque estaba distraída mientras me hacía un café. Verla y pensar en tomar algo de ahí me resultó tan poco natural que la devolví a su sitio. Por qué no se la doy se preguntarán; pues porque la compré yo, es linda y forma parte del "Museo Personal de Mariana Artieda", como llama mi madre a esta cuestión de guardar cosas y tomarles estima desde que soy chica.<br />
<br />
Este es el primer intento de escribir sobre mis cosas, y el que dará lugar a una nueva etiqueta. No solo de sus exs y las cosas que dejaron vivimos la minas. Tengo las obras completas de Shakespeare edición 1858 heredada de alguien que jamás conocí, discos de pasta y una vitrola, una máquina de escribir de comienzos del 20, y muchas cosas más, cada una con su propio cuentito. A ver qué sale de esto...Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-86525209045590549832015-05-21T00:57:00.001-03:002015-05-21T01:01:42.707-03:00EratoPrefiero volver a mirarte de lejos<br />
a nunca más de cerca.<br />
Prefiero vuelvas a ser espejismo diurno<br />
al silencio taciturno que provoca tu ausencia.<br />
La ausencia que nunca fue<br />
porque tu presencia nació breve<br />
pero con un efecto maravilloso,<br />
impulsivo aunque inerte.<br />
A la luz de tu sonrisa<br />
pude verme feliz,<br />
pude verme real,<br />
dejar de ser actriz<br />
de una vida que no era vida,<br />
de una máscara de cera<br />
que se acomodaba a los designios<br />
de todo cuanto me rodea.<br />
De corazón te digo gracias,<br />
aunque jamás te enteres<br />
has sido un don en mi rutina,<br />
un respiro para mi suerte.<br />
<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-21603061888598744432015-05-19T00:27:00.001-03:002015-05-19T00:27:49.439-03:00Y golpean a tu puerta...No importa cuánto te niegues a avanzar, cuánto reniegues de tus pendientes ni cuán la sota te hagas de las cosas que quisiste en su momento y dejaste de hacer por mil y un motivos. Tarde o temprano, cuando menos te lo esperes, van a aparecer, todas a la vez, como una seguidilla de señales luminosas en catarata, una atrás de la otra, como una lluvia de estrellas fugaces. Y ahí vas a estar, parada, con una red cazamariposas, tratando de atajarlas todas a la vez, bailando y con una sonrisa en la cara por volverlas a ver, porque las querés y por eso las elegiste,<br />
A la lista de cosas reaparecidas se le suman mis cinco materias para recibirme de Licenciada en Lengua Inglesa (con su respectiva tesis, claro). Sé que volvió ahora porque estoy en un momento mental, laboral y espiritual en el que le puedo hacer frente y tratarla con el amor que se merece. Porque por más que reniegue, amo mi carrera. Y así, una vez más, golpean a tu puerta... es hora de abrir para poder cerrar. Sólo es cuestión de encontrar la llave.Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-37960327398152800362015-05-09T21:18:00.002-03:002015-05-09T21:22:14.942-03:00Blablabla Sh Sh ShPrefiero la crueldad de la palabra a la tiranía del silencio.<br />
El discurso presenta una variable infinita de posibilidades, ya sea para rebatir opiniones, reforzarlas o simplemente lanzarlas a la vida, al aire, esperando y otorgando tal o cual resultado. En un diálogo, por más sordo que este sea, las palabras pueden encontrarse y batirse a duelo, dejando o no ganadores, pero sí exponiendo sus razones, menciones y motivos. En cambio en el silencio... en el silencio las posibilidades infinitas de desencuentro son tan vastas como las arenas del tiempo... El silencio puede ser llenado por mil y un escenarios que jamás llegarán a ser certezas, siempre vivirán en la eterna nube de las aproximaciones y potencialidades. Lo no dicho es el escarnio de los paranoicos, la tumba de los deseos, el fin del contacto. La angustia de los curiosos. Un nudo en el pecho. El punto inicial al infeliz recuerdo.Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-39115236318913951622015-05-08T00:15:00.000-03:002015-05-08T00:23:10.736-03:00El oboe de miAyer tenía pensado contar cómo aprendí a bailar el vals en brazos de mi abuelo Goro durante su fiesta de 50 años de casado, pero el sueño me ganó y Roberto decidió terminar el texto por sí mismo... Si bien es cierto que ese es uno de los recuerdos de infancia más lindos que tengo (y uno que reproduzco cual film en mi memoria cada tanto) y que se transmuta en que, cada vez que haya ocasión de hacerlo, baile el vals con maestría (a diferencia de mucha gente que conozco, que más pareciera bailar un chamamé chic), existen muchas otras cosas que le debo, como una suerte de herencia intangible, a mi querido Goro. Y una de ellas es el gusto por la música clásica y sinfónica. Recuerdo despertares en casa de los abuelos durante vacaciones de invierno, el despegar los ojos con mucha parsimonia mientras mis narinas tomaban conciencia del aire frío y metálico que aspiraban como recambio del tibio y perfumado con suavizante para la ropa tras haber pasado una noche con la cabeza tapada con los acolchados. Despertarme en Forest (tal era el apodo del depto) significaba envolverme en una colcha, ponerme los patines para el piso encerado de la Lila y deslizarme con mucha fiaca hasta la cocina donde los tres, mamá, el abuelo y la abuela, estaban encerrados charlando, leyendo el diario y escuchando Radio Mitre. Y ver sus cabezas girar y recibirme con una sonrisa, la cual vislumbraba a medias con ojos de niña entredormida.<br />
Entre las tantas miles de cosas que disfrutaba hacer con el Goro, una era escuchar música... amaba sus discos, los cuidaba con el mismo amor que a sus nietos. Siendo de un origen tan humilde (el cual ya he mencionado en otro <a href="http://tejurepo.blogspot.com.ar/2012/04/franz-el-goro-y-pepin.html" target="_blank">post</a>), sus tesoros mayores eran aquellos de los cuales se había apropiado para volverse el hombre que había deseado y conseguido ser, por tanto, sus discos y sus libros eran tan fundamentales para su identidad como su nombre y apellido. Junto a él, aprendí a disfrutar de Mozart, Debussy, Chopin, Wagner, y tantos otros virtuosos. Oía la música con ojos cerrados y una sonrisa, sentado en un cómodo sillón con la cabeza echada hacia atrás y los brazos en jarra como quien, inconscientemente, advierte que el gozo que está surcando es tan pleno que no deberá ser molestado ni interrumpido fuera de él. Mientras esto ocurría, yo, sentada en el piso calentito por la calefacción central, miraba con intriga y curiosidad anhelante a mi abuelo mientras hacía danzar a mis muñecas al son de la música. El abuelo entonces, sin dejar su postura defensivamente relajada, hablaba y decía: «Prestá atención al piano en esta parte», y yo cerraba los ojos, me acostaba en el piso y forzaba los oídos para identificar el sonido indicado entre tantos. «¡Ahí! ¿Oíste?», decía él, y yo le respondía que sí, que había logrado aislar del resto la melodía precisa (y preciosa) que tanto quería que oyese. Así hacía con todos los instrumentos, tanto que me acostumbré a ejercitarlo a solas, sin él para que me diera instrucciones. Y de todos los sonidos, de todas las melodías, de todos los instrumentos, el que siempre lograba ganarse mi atención sin hacer esfuerzo alguno era (y lo sigue siendo) el oboe. Su dulce nasalidad metálica me tocaba el corazón, como si las fibras del mismo fueran parte de sus zapatillas y su pulso, el ritmo a seguir.<br />
Con el correr de los años, mamá decidió que era hora de mandarme a estudiar música y, tras cuatro frustrantes años de solfeo y teoría y piano y digitaciones, sólo me quedé con el canto y algunos conocimientos básicos de lectura musical.<br />
Hace cinco años, cuando me mudé a Capital, después de muchos ires y venires, conocí a una mujer maravillosa y eléctrica de pelo anaranjado que sería mi profesora de oboe. Comprar uno requirió la traducción completa de un libro y un peregrinaje bastante complejo, dado que no son instrumentos ni muy comunes ni muy baratos. Y si bien hice lo posible por ser una alumna dedicada, mi compleja agenda laboral no abonó a la causa. Al volver a Misiones, el oboe se mudó a un cajón, junto con el atril, las partituras y las cañas. Hasta hoy. Así como me he puesto en firme con recuperar mi cuerpo andando en bicicleta, mi motricidad fina volviendo a dibujar, mi capacidad discursiva volviendo a escribir acá y mi acervo intelectual volviendo a leer cuanto libro caiga en mis manos (a la vez, porque de leer de a uno no me sale), hoy me decidí a recuperar mi música y a mi oboe.<br />
Hoy lo saqué de la caja, y ya el sólo ensamblarlo, poner las cañas en agua y soplar me llenaron de electricidad placentera las venas. Al cabo de una hora, luego de hacer un esfuerzo bastante grande por recordar cómo se forman las notas ya pude sonar escalas bastante potables. Y encaramada en la autosatisfacción de romper con mi rutina de repeticiones, le mandé un correo electrónico a Nené (tal es el nombre de mi profesora), preguntándole si podría verla la semana entrante para un abrazo, un café y una clase, dado que estaré en Buenos Aires por motivos de trabajo. Cuánta fue mi alegría al recibir su mediata respuesta afirmativa que estará esperándome, a mi y al bebé (como ella le llama). Y así, de a poco, podré volver a hacer cosas que amo que sólo yo me he quitado. Y quién sabe, tal vez un día, pueda producir una melodía digna de que el Goro se sentara en un sillón, con ojos cerrados, la cabeza echada hacia atrás y los brazos en jarra y siempre, siempre, siempre, con una sonrisa de placer en el rostro.<br />
<br />
<div class="separator" style="clear: both; text-align: center;">
<iframe width="320" height="266" class="YOUTUBE-iframe-video" data-thumbnail-src="https://i.ytimg.com/vi/d6AC5ZvA0ZE/0.jpg" src="https://www.youtube.com/embed/d6AC5ZvA0ZE?feature=player_embedded" frameborder="0" allowfullscreen></iframe></div>
Este es mi concierto favorito. Sírvanse disfrutarlo como lo haría el Goro. Me lo van a agradecer.<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com2tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-77500613317513959262015-05-07T10:41:00.002-03:002015-05-07T10:41:57.254-03:00ValsCuando tenía siete años, mis abuelos cumplieron cincuenta de casados. <span style="color: blue;">wq2222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222222tyhszxxxxxxa'''''''''''''''''''''''ppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppppTYLÇÇÇÇÇÇÇÇÇÇ0 y¬6666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666666677777777gweg,,,,,</span><br /><br /><br /><br />(Texto intervenido por Roberto, el gato troll de la informática hogareña durante el trascurso de la noche...)Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-69853932502192403842015-05-05T16:35:00.002-03:002015-05-06T15:59:52.449-03:00Haruka¿Cómo alguien puede vivir llevando el Sol en los ojos?<br />
¿Develando anhelos con una sonrisa de dientes imperfectos y, aún así, preciosos?<br />
¿Cómo puede el tacto gentil de un hada esconderse detrás de una fachada tan poco acorde pero, al mismo tiempo, tan coherente?<br />
¿Puede acaso alguien, obnubilada ante tan armoniosa presencia no sentirse cohibida de acto, palabra y acción? ¿Es tan impensable el congelamiento de las reacciones, la sangre y el suspiro?<br />
Sí, lo es... y resulta evidente y claro lo intangible de tu abrazadora y aun sutil existencia.<br />
Un simple ser terreno no puede aspirar a ser deseado ni requerido por tal maravilla etérea; por quien, como la luz que su aura destila, danza entre nubes suspendida por su propia leveza. Quien contempla al mundo desde regio palco no debe ser incordiada por cuestiones mundanas de terrenal presencia, ni admitir en su dorada estela a quien usa ni más ni menos que las piernas para movilizarse, a quien arrastra su existencia por Gea, a quien la Gravedad llama y fija una y otra vez en su seno, aun cuando se le resista...<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-370365483483419372015-05-03T23:38:00.000-03:002015-05-03T23:39:17.669-03:00Pasos sobre el cristal«Sos demasiado buena...»<br />
«Sos una dulce...»<br />
«Sos demasiado inocente...»<br />
«Tenés que dejar de mirar a la gente con el filtro de tus expectativas y empezar a verlas por como son...»<br />
«Pará de esperar lo que deseas de las otras personas y empezá a ver qué es lo que están dispuestas a darte...»<br />
«Dejá de darle pasto a los camellos... la gente es como es, no como vos te imaginás que son».<br />
«No podés andar regalándole un pedacito de tu corazón a cuant@ nab@ conocés, Mariana, no es sano».<br />
<br />
<br />
Tantas miles de veces he des(oído) esos consejos/palabras... y tantas otras sufrido las consecuencias sentimentales (y físicas) de no lograr protegerme de los embates del mundo y sus habitantes... Ya corren tres décadas de construir castillos en el aire y dar pasos sobre el cristal con sandalias de pluma, rezando, rogando y esperando que no cruja... Sin embargo sigo teniendo la estabilidad emocional de una nena de cinco años que va por la vida regalando corazones mal trazados en papel de estraza.Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-73389397310803535842015-05-01T00:30:00.003-03:002015-05-01T07:11:38.641-03:00Mi carameloMuchas veces, las emociones se encadenan y resultan en recuerdos, en un reciclaje de sensaciones de momentos olvidados, cosas vividas que, como una suerte de catarata en forma de espiral, nos llevan a un punto en el tiempo que nos hace doler... Otras, un hecho aislado, el cual no es racionalizado en su momento, se escapa del encajonamiento y sale a la luz en forma de otra cosa, con otra máscara...<br />
Mi primer amor se llama Francisco. Era medio rolinga, tenía unos rulos hermosos y siempre olía a shampoo. Y tenía un lunar que parecía un arito en el lóbulo derecho. Yo tenía 15 años y era flor de pelotuda. No tenía idea de lo que era que alguien guste de vos y me enamoraba en un tris (no es que haya cambiado mucho 15 años después, a decir verdad). Fue mi primera relación a distancia, la cual sería tan solo el principio de una seguidilla que se viene prolongando in eternum. Nos conocimos en ensayo del grupo de teatro en el que participábamos, entre otros, su papá y yo. Esa noche hubo una fiesta y, para mi incredulidad, terminamos chapando en el baño de la casa de su papá. Nunca me pude olvidar. Yo no lo podía creer: que ese chico TAN lindo me diera bola a MÍ que era una gorda borde en proceso de adelgazamiento y que no tenía ni el principio de eso que se llama autoestima. Al día siguiente, nos encontramos en la casa de un amigo suyo, volvimos a chapar y al final lo terminé acompañando al aeropuerto para despedirme y regalarle una pulserita con su nombre... yo me quedé con una con el mío, como bien establecía el uso de la época. En eras del ICQ y el teléfono fijo, la cuenta de mi casa se fue a las nubes y mi vieja me vivía bajando el disyuntor de la compu para obligarme a parar de hablar... A mi no me importaba nada, yo sólo quería hablar con Francisco y que me hablara de porqué le gustaba tanto 2 minutos, de lo mucho que extrañaba a su hermanita y de lo que hacía en La Plata. En una de esas charlas, en las cuales estaba claro que lo nuestro no andaba ni en pedo, me dijo algo que jamás me olvidé (y que cada vez que lo recuerdo el corazón se me hace un nudo de angustia): «¿Qué sabés? Capaz que de acá a 10 años estamos casados y nos cagamos de risa de todo esto».<br />
Claro está que no sucedió. Nos peleamos a muerte (hackeada de ICQ de mi parte mediante) y cuando finalmente se mudó acá, no nos dirigíamos la palabra. Yo lo odiaba. No lo podía ver. Pensaba que era un idiota egoísta y él pensaba que yo era una pelotuda inmadura.<br />
Así pasaron los meses y, un bello día, lo vi pasar de casualidad por la plazoleta que quedaba frente a mi escuela. Lo saludé (cosa q no había hecho hacía mucho tiempo) y él me devolvió el saludo con una sonrisa. Esa noche me conecté a ICQ y le hablé. Hicimos las pases y quedamos en un todo bien, en paz... Me lo volví a cruzar en un recital de Bersuit, y cuando empezó a sonar el tema que da nombre a este escrito, me miró y me hizo señas de que era para mí. Sonreí y seguí cantando con mis amigas, reconfortada.<br />
Pasó el tiempo, poco esta vez...<br />
Como de costumbre, una en la secundaria tiene gimnasia a contraturno y yo, como de costumbre, llegué muy dormida ese lunes al colegio. Cuando llegué, me contaron que había muerto un chico del Nacional en una pelea, que se habían agarrado a las piñas con pibes de otro colegio y demás. Yo lancé un speech de lo estúpidos que me parecían los vagos por agarrarse a trompadas sin medir consecuencias. Pregunté quién sería, pero nadie sabía nada más que que un pibe de nuestra edad había muerto a manos de otros de la misma edad. De más está decir que me olvidé del tema hasta que subí al colectivo y en la radio no se hablaba de otra cosa. De inmediato, tal vez por mi naturaleza trágica, empecé a pensar: «Que no sea Francisco, que no sea Francisco, que no sea Francisco». Así en un interminable loop que duró los 15 minutos que duraba el viaje. Cuando llegué a casa, la empleada de mamá me abrió el portón y me contó la misma historia, del chico muerto en la pelea... Automáticamente, le pregunté si habían dicho el nombre y me dijo que no. Que sólo decían que era el hijo de un tal doctor Centeno... y el mundo se paró, clavó los frenos y yo me tuve que sujetar del muro del balcón para no caerme al piso... gateando, entré a casa y la voz del locutor rezaba: «Francisco Javier Centeno fue muerto...» Y yo dejé de oír, dejé de pensar, de respirar y de caminar, y entre intentos de respiración, arrastrándome como un herido de guerra, llegué a mi cama y me trepé como un náufrago que se trepa a un vestigio de leño flotando en el mar y lloré, lloré y me desarme en un llanto desgarrador. El teléfono empezó a sonar, una amiga me llamaba para ver cómo estaba y si ya sabía... No sé cómo hice, pero a colegio fui igual y el ambiente era desolador... todo el mundo lo conocía, de otro tiempo claro, y todos estaban mal. Yo lloraba y nadie entendía por qué yo, la loser, nerd, otropalo, lloraba a un muerto que me era ajeno... pero era más mío que de ellos. A la tarde fui a inglés, todavía con la cara hinchada y me preguntaron qué me pasaba. A regañadientes dije que conocía al chico fallecido... Y entonces, una compañera con la que casi no hablaba dijo que ella sabía... Le pregunté con cara de sorpresa por qué. Y contó que su dentista era amiga del papá de Fran, que había estado en el velorio y que entre las tantas cosas que hablaron le dijo que le sorprendía que yo no hubiese estado ahí porque él me quería mucho. Y el mundo se me vino encima otra vez...<br />
Pasó el tiempo otra vez... sin embargo, siempre que escucho ese tema, el llanto sale solo.<br />
Al comienzo no podía ver a su papá (ni él a mí) sin lagrimear. Hasta el día de hoy, sé que se interesa por mi vida y por saber en qué ando. Como una parte de la historia de su hijo que sigue acá y hace cosas, crece, evoluciona y anda...<br />
Hace un tiempito en mi trabajo me tocó atender a una chica con un bebé. Cuando tomé su DNI, leí el nombre y descubrí que era su hermana. Me temblaban las manos. Le hice las preguntas del speech de rigor y después, con voz endeble, le pregunté si era la hija del doctor. Me dijo que sí y yo, tartamudeando le dije hija de quién era... «¡Ah! ¡Vos sos Mariana!». Y a mi me volvió el nudo a la garganta que hacía bastante había dejado de sentir. Solo la miraba y miraba al bebé que, de hecho, es muy parecido a su tío. Cuando se fueron, tenía los ojos brillantes, pero logré controlarme. A la semana, me crucé con su papá que me dijo que ella le contó que nos habíamos encontrado... le sonreí y le dije que sí, que me sorprendió que me reconociera. Él me devolvió una sonrisa con ojos tristes y me cambió de tema.<br />
Hoy ella me agregó a Facebook... la acepté, pero todavía no me animé a hablarle. Me pasé el día muy melancólica y hasta lloré por motivos completamente ajenos e inconexos a la cuestión... No fue solo hasta que llegué a casa y me puse a escuchar música en Youtube quien, de golpe, decidió que el mejor siguiente tema para sonar sería ese que comprendí qué fue lo que me dejó así... No fueron las circunstancias presentes, sino las pasadas, las que me trajeron acá... El seguirte extrañando 13 años después, muchos más de esos 10 que una vez mencionaste.<br />
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<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-81458923282838292942014-09-29T23:37:00.000-03:002014-09-29T23:37:02.142-03:00Dos meses...En exactamente dos meses estaré cumpliendo treinta. Ay. Suena tan terrible el número. Suena como una alarma de auto en medio de la noche, como un trueno en medio del plácido sueño.<br />
Una va por la vida cumpliendo años y de golpe llegan los veintinueve y se da cuenta de que es el último "veinti" que va a tener, que si ya la "señorean" a esta edad, pasado ese número será una geronte, que más vale esté casada y tenga un par de críos o se arma. ¿Qué se arma? La vida señores, la vida de gente "ADULTA".<br />
Es como si después de esa cifra ya no quedaran más espacios para las irresponsabilidades y dilataciones en las decisiones. O te casás o te separás; o te recibís o te olvidás; trabajás o trabajás... Igual, me vengo haciendo un toque la boluda... es como si fuera caminando por la calle y hubiese alguien que me siguiera los pasos; agarro fuerte la cartera, subo el volumen del auricular y le meto pata al paso, pero la presencia sigue. En exactamente dos meses, me va a tocar el hombro y no me va a quedar otra que darme vuelta y preguntarle qué quiere... Y me va decir que el tiempo no es un chicle y que ponga las pilas.<br />
Igual, aunque me haga la sota, algo anduve haciendo. Cambié de laburos, restringí los puchos y volví al vapeo y voy, de a poquito, acomodando mi vida en los cajones del placard de la adultés. La idea sería que el placard ese no fuera un armatoste de quebracho que te ocupe todo el espacio de la habitación, sino un mueble re cool, patinado y decorado con decoupage. Veremos, veremos...<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-63783640512689101352014-02-13T03:49:00.000-03:002014-02-13T03:57:14.123-03:00Ya quiera...Ojalá los pastores vangélicos que aparecen a las 12 de la noche en la tele tuvieran tanta onda como Daddy. Ahí, ni un drama, te voy a misa todos los días sin chistar (además q la "hostia" debe pegar de lo lindo, seguro).<br />
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<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-9275033680270676952013-12-05T03:20:00.002-03:002013-12-05T03:41:35.705-03:00La enterizaSiempre que alguien deja de fumar le advierten que va a engordar, que será cosa de la ansiedad y que va a tener más hambre que gomero a una vedette... yo creo que más que por ese factor, comí porque recuperé el sentido del gusto y todo me parecía más rico que antes. Sea lo que sea, me fui ensanchando para los cuatro costados a lo largo del año y sumado a que no movido mucho el panaco carreras y laburo mediante, ahora califico más como modelo de Botero que de Michael Kors. Por tanto, este verano me paso a la enteriza, las bikinis están reservadas para otro tipo de minita y, queridos lectores (si es que aún me queda alguno) había sido que encontrar una que me quede como la gente es bastante complicado. Si quedaba un nicho de indumentaria con el que no tuviera mayores dramas, este acaba de revelarse esquivo y ladino.<br />
Ser alta implica que comprarte un jean, un par de zapatos o un saco se volverá una expedición donde te desnudarás cien veces, harás fuerza en probadores diminutos (golpeándote contra techos, puertas y espejos como quien lucha contra una enredadera asesina) y que, casi siempre, te terminarás comprando algo que no te gusta del todo, pero es lo que te anda y ya te pudriste. Pero nada de eso se compara con el flajelo de tener que embolarse en un negocio probando tandas y tandas de mallas que se ve de ensueño en la percha pero una vez que lograste embutirte en ellas se transforman en una pesadilla de lycra. Yo me pregunto quién fue el palurdo (porque estoy segura de que fue un tipo maquiavélico que odia a las mujeres, sino no se explica) que dijo y sostuvo que si una es larga de torso automáticamente eso conecta conque tiene las tetas de Lia Crucet o que si tenés poca lola tenés el torso de la enana Feudale. O quién fue el otro salame al que se le ocurrió inventar las tankinis y trikinis (ver fotos). A ver, papilo, si una tiene lomo para mostrar usa bikini, si está gorda una malla; ¡esos malditos y modernos puntos grises significan únicamente más lugares de ajuste para que te salte el/los rollo(s)! Y una cosa más: si hay tantas telas lindas para fabricar bikinis y esos otros engendros, ¿por qué mierda los modelos de enteriza son todos "Mirtha Legrand" style? ¡Que esté gorda no tendría que implicar que me tenga en enfundar en cosas bordó, negras o animal print!<br />
Como sea, seguiré buscando... no me voy a rendir tan fácil. Y por las dudas, si no encuentro, ya empecé a googlear modelos de burka... capaz impongo una moda y todo, quién sabe.<br />
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<a href="http://images01.olx.es/ui/11/29/43/1305279705_199522643_15-VENTA-DE-TRAJES-DE-BAnO-BIKINIS-TRIKINIS-Y-ROPA-DE-PLAYA-.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://images01.olx.es/ui/11/29/43/1305279705_199522643_15-VENTA-DE-TRAJES-DE-BAnO-BIKINIS-TRIKINIS-Y-ROPA-DE-PLAYA-.jpg" width="213" /></a></div>
Trikini: engendro de la moda que no te cree nadie que una mina con ese lomo vaya a usar, porque encima quedás toda mal quemada. Onda, la chabona se saca el trapito ese y le queda un bronceado con diseño de carita feliz.<br />
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<a href="http://www.womenzmag.com/wp-content/uploads/2012/11/Tankini-Swimsuits-all-body-shapes.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="187" src="http://www.womenzmag.com/wp-content/uploads/2012/11/Tankini-Swimsuits-all-body-shapes.jpg" width="320" /></a></div>
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Tankini: híbrido de bikini con remerita. Dale, chanchina de mialma, porque es re copado tener más lugares por donde se te asome el pandulce... par fa var.</div>
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<a href="http://l2.yimg.com/bt/api/res/1.2/3xGcSDvvQ21ooVLg_hZV6Q--/YXBwaWQ9eW5ld3M7cT04NTt3PTUwMA--/http://media.zenfs.com/es-ES/blogs/soyfashionvictim/367-irinashayk1.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="320" src="http://l2.yimg.com/bt/api/res/1.2/3xGcSDvvQ21ooVLg_hZV6Q--/YXBwaWQ9eW5ld3M7cT04NTt3PTUwMA--/http://media.zenfs.com/es-ES/blogs/soyfashionvictim/367-irinashayk1.jpg" width="202" /></a></div>
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¿Divina no? Ahora imaginate cómo le quedaría a Lilita Carrió. ¿Viste que no exagero?</div>
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<a href="http://www.rtve.es/imagenes/prendas-tradicionales-mujer-musulmana/1269977669626.jpg" imageanchor="1" style="margin-left: 1em; margin-right: 1em;"><img border="0" height="180" src="http://www.rtve.es/imagenes/prendas-tradicionales-mujer-musulmana/1269977669626.jpg" width="320" /></a></div>
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Por suerte, de esto sí hay varios modelos. Le instalo un sistema de refrigeración y ya, toda la onda.</div>
Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-59028665272269519302013-11-27T01:42:00.000-03:002013-11-27T04:03:02.385-03:00Déjà vu lactante<br />
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<span lang="ES-TRAD">Ayer tuve que hacer acto de presencia en un
ritual popular llamado "fiesta de un año del bebé de una amiga" y,
rodeada de ese mundo de cochecitos, chizitos, sopresitas, mocos y Sapo Pepe, tuve un déjà vu... de golpe me di cuenta de que la situación se me presentaba similar a una de cuando tenía 12 años, cierta vez que nos rateamos con
las chicas y terminamos en una farmacia/supermercado mirando toallitas (no
había shopping en Posadas por aquel entonces) y todas empezaron a señalar las
que usaban y a decir cosas de las alas, los geles, los tampones desvirgantes y
demás… y cuando me preguntaron qué marca usaba yo, bajé la cabeza, me puse
colorada y con mucha mucha vergüenza y pena confesé que no me había venido
todavía. Inmediatamente, me consolaron (?) sosteniendo que ya me iba a llegar
(???), pero claro, me sentía un marciano o, como recuerdo haberle dicho a madre
en ese momento: “como una cucaracha entre hormigas”.<o:p></o:p></span></div>
<div class="MsoNormal" style="text-align: justify;">
<span lang="ES-TRAD">Y ayer me sentí parecido, pero sin vergüenza ni sonrojación, pero sí como una especie de marciana que
no cambia pañales ni esteriliza tetinas ni conoce de pediatras y piensa que
caca es caca, no un test de Rorschach bioquímico a descifrar… igual no es un
tipo de marcianitud que me desvele, ojo, por mí que siga esperando, todavía no
conozco Europa. Más bien diría que, pasada la incomodidad de un principio, esta vez fui una cucaracha con lentes de sol y stráss en el lomo.<o:p></o:p></span></div>
Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com1tag:blogger.com,1999:blog-8633849619675297468.post-48600534906483728992013-11-19T02:38:00.003-03:002013-11-29T11:09:10.903-03:00Hablá más fuerte que no te escucho...Mi queridísimo camarada de altura creado por García Ferré tenía la posta y su conocido latiguillo expone un molesto inconveniente que solemos atravesar las gentes de largas patas: no escuchar cuando alguien más bajo habla. En innumerables ocasiones me ha sucedido estar en un grupo compuesto en su inmensa mayoría por gente de estatura promedio y que allá abajo la conversación sea de lo más divertido y tener que agacharme para poder enterarme de qué pasa o que estén secreteando, preguntar de qué hablan y que el que esté más cerca tenga que estirarse para contarme a quién cuerean, ocasionando de este modo que, si ese cuereado estaba en las cercanías, pudiera percatarse de que algo pasa. Se repite esto en los boliches, cuando el volumen de la música hace imposible la comunicación, mi elevada cabeza jamás se entera de que las amigas van al baño y de golpe se ve parada sola en medio de la multitud. Pero sin dudas, el más claro ejemplo me sucedió el jueves pasado: fui con una amiga a mirar vidrieras y entré a una negocio. Cuando salí la busqué con la mirada y como no la vi, seguí mi camino. A las tres cuadras siento que gritan mi nombre, me doy vuelta y la veo venir corriendo, sacando humo con sus pequeñas piernecillas, tratando de alcanzarme. Aparentemente, había estado todo el tiempo a mi lado e incluso me habló, pero como su boca estaba más abajo, no la oí y la tuve corriendo atrás mío el resto del trayecto. De igual forma, llegamos a un acuerdo, yo voy a tomar más en cuenta lo que pasa allá abajo y ella se preocupará por hablar hacia el "allá arriba", omitiendo la pregunta de si hace frío o no.<br />
<br />Marianahttp://www.blogger.com/profile/17409260479791667012noreply@blogger.com0